Asesoramos a las comunidades para la producción de harina de algarroba y otros productos derivados.
Históricamente la algarroba ha tenido un valor simbólico, además de ser un alimento fundamental para el pueblo Wichí y Nivaĉlé. Las mujeres ejercen un rol central ya que son quienes cosechan sus frutos y producen la harina.
También realizamos asesoramientos y apoyo a familias indígenas que se inician en la elaboración de mieles del monte para sus emprendimientos productivos.
Desde hace varios años, llevamos adelante un proceso de experimentación e investigación sobre las abejas nativas sin aguijón y sus mieles. Articulamos esfuerzos con investigadores especializados para generar nuevos conocimientos vitales en el desarrollo del Gran Chaco.