Iniciamos nuestras actividades en 1986 y nos conformamos como Asociación Civil sin fines de lucro.
Por esos años, un grupo de hombres y mujeres jóvenes, conocimos el oeste formoseño y a sus pobladores. Paulatinamente forjamos un compromiso de solidaridad con los pueblos indígenas y criollos de Formosa teniendo a la región del Gran Chaco como nuestra casa.
A lo largo de estos años se fueron incorporando nuevos miembros, socios y socias, amigos y amigas de Formosa y otras provincias que aportaron nuevas motivaciones de solidaridad a la experiencia y el compromiso de los y las jóvenes de ayer.
Durante este tiempo construimos espacios a partir del diálogo con personas pertenecientes a diferentes culturas y cosmovisiones. Mediante vínculos de afecto aprendemos, reflexionamos, nos alegramos, iniciamos búsquedas, compartimos interrogantes y seguimos creciendo.